El lado amable del estrés
Si ves al estrés como un empuje necesario para avanzar, puede resultar positivo para tu salud física y mental.
“En un episodio de estrés, esta hormona (la oxitocina) nos motiva a actuar, ya sea para pedir ayuda o para ayudar y asistir. Su liberación tiene muchos efectos positivos.”
Últimamente, una de las palabras que más escuchamos es ‘estrés’ y su efecto perjudicial para la salud. De hecho, estamos expuestos a más estrés del habitual, uno inusual al que muchos de nosotros nunca nos habíamos enfrentado. El estrés a la incertidumbre, a la enfermedad, a la inestabilidad económica, al no poder salir, a las noticias y a la información que recibimos.
Indagando sobre este tema que nos persigue, y buscando maneras de enfrentarlo, me encontré con una charla de TED, con una información digna de compartir. Es una charla corta de 14 minutos de la Dra. Kelly McGonigal (hagan click para que lo vean).
Basada en estudios e investigaciones, la autora dice que el estrés si no es percibido como algo malo y perjudicial, sino al contrario, lo tomamos como un incentivo para reaccionar y actuar, como un empuje necesario para avanzar, puede resultar positivo.
Así lo demostró un estudio donde las personas que pensaban que el estrés les iba a hacer daño, presentaron problemas cardiovasculares y muertes prematuras y, por otro lado, las personas expuestas a niveles de estrés similares que lo percibían como algo positivo, no sufrieron ninguna alteración de salud.¡Increíble! Una prueba más del poder de la mente y de la convicción. Espero que todos quienes ahora leen esto, se acuerden cuando aparezca un nuevo episodio de estrés, y lo perciban como una situación en donde podemos afinar nuestro pensamiento y actuar positivamente.
También hay que mencionar que en la charla se habla del fascinante poder de la oxitocina, conocida como la "hormona del abrazo". Esta es una hormona del estrés que se libera al abrazar a alguien, incentiva al contacto físico y fortalece las relaciones. La oxitocina nos despierta la necesidad del contacto físico, activa la empatía y nuestra disposición a ayudar.
En un episodio de estrés, esta hormona nos motiva a actuar, ya sea para pedir ayuda o para ayudar y asistir. Su liberación tiene muchos efectos positivos: actúa en el cerebro y en el cuerpo, protegiendo nuestro sistema cardiovascular de los efectos del estrés. Y es un antiinflamatorio natural, ayuda a las células del corazón a regenerarse.
En los momentos de estrés, acercarnos a otros, ayudar o pedir ayuda, activa la generación de oxitocina, despertando la empatía, que a su vez libera los vasos sanguíneos.
Después de este análisis, hay razones poderosas para no temer al estrés, hay que recibirlo, aceptarlo y tomar lo mejor de él.
Me quedo con la idea de que las cosas no son ni malas, ni buenas, puede existir una dualidad en todo lo que vivimos y experimentamos, está en nosotros el descubrir lo bueno de cada situación.
Aquí les dejo una razón para aceptar el estrés y aprovecharlo de manera que les pueda servir, que les despierte sus fortalezas y habilidades desconocidas, y lo mejor, aflore la empatía, ese sentimiento que lo necesitamos tanto en estos momentos.