En revista Clubes: “La mujer de las setenta millas”

Mi experiencia IM empezó en el 2008 cuando corrí mi primer 70.3 y en el 2009 mi primer IRONMAN.

Mi experiencia IM empezó en el 2008 cuando corrí mi primer 70.3 y en el 2009 mi primer IRONMAN.

Realmente no sé si ser deportista y ser fuerte es un símbolo feminista. Solo sé que siempre sentí que podía hacer lo que yo quería. Se necesita fortaleza para hacer lo que uno quiere. La mujer ha sido fuerte siempre; solo que hoy tenemos un montón de oportunidades.
— Marialuz

Fui portada de revista Clubes en 2015, a propósito de la llegada del IRONMAN 70.3 a Ecuador. Siempre soñé con una competencia de este calibre en mi propio país y ya en ese entonces conocía a mucha gente talentosa a la que se le hacía difícil correr fuera.

“Hoy por hoy, son cada vez más las mujeres que emprenden, con éxito, las travesías más largas y significativas. Marialuz Arellano es una de ellas. Este año, apostó por materializar un gran sueño: organizar la primera carrera IRONMAN Ecuador.

Un largo camino

Marialuz nació en 1973. A sus 42 años luce verdaderamente espectacular; pero no solo en un sentido estético. Marialuz se ve sana, fuerte, joven y realizada. Hoy, es una magnífica deportista de élite y, además, una empresaria tremendamente exitosa que ha sabido hacer de la actividad física la base de una maquinaria sólida e interesante.

Marialuz corre sola. Su entrenamiento es diario. Como el deporte que la apasiona es el triatlón, además de correr, lógicamente nada y hace bicicleta. La variación en sus entrenamientos se basa en el calendario de competencias que tenga configurado para el año. Nos encontramos en su casa para conversar, después de su entrenamiento. La charla es a veces interrumpida por llamadas de trabajo. Marialuz está en el medio de la planificación y desarrollo del primer Ironman 70.3 en Ecuador.

El pasado mes de febrero lanzó oficialmente la carrera: el Medio Ironman All you need is Ecuador, que consistirá en una carrera de triatlón de 70.3 millas y se correrá en Manta el 9 de agosto de este año (2015). En sus actividades de empresaria, Marialuz se ve como un pez en el agua. Todo parece tan sencillo... Pero la realidad es que le costó mucho llegar hasta aquí.

“Realmente no sé si ser deportista y ser fuerte es un símbolo feminista. Solo sé que siempre sentí que podía hacer lo que yo quería”.

“Realmente no sé si ser deportista y ser fuerte es un símbolo feminista. Solo sé que siempre sentí que podía hacer lo que yo quería”.

“Siempre soñé con crear un Ironman en Ecuador. Conozco gente muy talentosa a la que se le hacía difícil correr fuera del país”, dice Marialuz. Por eso, desde hace años, cuando ella salía a entrenar, visualizaba lo que sería correr un Ironman en su propio país y, de hecho, ya se imaginaba a Manta como el lugar ideal. Marialuz no pensó que ese día llegaría tan pronto. Pero ese sueño que siempre estuvo ahí de repente estaba muy cerca de convertirse en algo concreto.

En septiembre del año pasado, surgió una oportunidad, empezaron las conversaciones más serias con el auspiciante principal: el Ministerio de Turismo. “El turismo deportivo está en auge en el país. Estábamos esperando la llegada de un auspiciante fuerte con el que empezar el proceso y el Estado nos apoyó”, cuenta Marialuz. En enero de este año, llegó a sus manos el acuerdo oficial con Ironman. Era un documento de sesenta páginas, muy complejo y específico. Realmente estaba sucediendo: Ironman Ecuador era prácticamente una realidad. l“Solo al pensar en firmar, ya sabíamos que estábamos metidos hasta el fondo. Había que aceptar el reto y firmar”, cuenta la cabeza de Sportime, la empresa con la que se pudo concretar la carrera. Después de eso, se seguía tratando de correr, pero ahora contra el reloj, en la búsqueda de más auspiciantes. Ahora la cuenta regresiva está activada. La carrera está cada vez más cerca y la gente ya ha empezado a responder. Al cierre de esta edición, Ironman Ecuador ya tenía más de 1000 inscritos. El cupo llega a los 1500.

Esta mujer de 1,58 metros de estatura y 116 libras de peso es físicamente muy fuerte; pero su fortaleza física es solo superada por la de su mente. Su camino hacia el éxito deportivo empezó en su infancia. Era una gran deportista. Luego llegaría la adolescencia y con ella las fiestas y la distracción, que la desviaron temporalmente del deporte. En la universidad, retomó el deporte, cuando, para matar una hora hueca, empezó a ir a un gimnasio a diario. Más tarde se certificaría como instructora de spinning; luego llegaría su primera Últimas Noticias y luego la idea, con una amiga, de correr un Ironman. Era 1999. Se pusieron un plazo de cinco años para cumplir esa meta. En medio de eso, Marialuz terminaría sus estudios de Lenguas Aplicadas y más tarde trabajaría como asesora financiera en un banco, un trabajo que disfrutaba muchísimo.

Pero el deporte se impuso. Marialuz empezó a entrenar por su cuenta. “Tenía un libro que se llamaba ‘Swim, bike, run’ y entrené sola con ese libro”, relata. El tiempo pasó, hubo muchas carreras en medio y el plan de cinco años para llegar al Ironman se convirtió en uno de nueve, y aunque tarde, el primer Ironman llegó y a este le siguieron varios.

En el 2008 Marialuz corrió su primer Medio Ironman y en el 2009 su primer Ironman completo. Cuando llegó su segundo Medio Ironman, Marialuz clasificó al mundial, lo que llevó su desempeño y sus metas a un nuevo nivel. Tiene ya cuatro Ironmans a su haber. Hoy se plantea correr cinco carreras al año, entre Ironmans y Medios Ironman, una meta anual sumamente exigente. “No quisiera pensar en corre menos que eso; pero sí sé que no mucha gente está tan loca como yo”, comenta, sonriendo.

A Marialuz le ha tomado mucho tiempo y esfuerzo cumplir sus metas; pero ¿qué más hizo falta para llegar hasta aquí? “La base está en hacer lo que uno ama. Es como estar jugando como un niño. Es importante ver en tu mente el resultado, visualizarte terminando. Hay que tener claro el resultado final. Sin embargo, es el camino lo que vale la pena. Cuando llegas a la meta, la carrera ya se acabó y es algo que dura unos pocos segundos. Todo lo importante sucedió en el medio”.

Ironwomen o el deporte como feminismo

Hay una frase que últimamente está de moda: “Strong is the new pretty”, que podría traducirse como “Ser fuerte es el nuevo ser bonita”. Esta afirmación nos habla del nacimiento de un nuevo tipo de mujer: aquella que no le teme a nada; que no cree que la fortaleza física y los músculos bien definidos le resten feminidad; que se preocupa menos por su apariencia y más por su salud; una mujer que ya no está dispuesta a quedarse sentada y observar, sino que quiere ser la protagonista, quiere liderar. En ese contexto, resulta inspirador que sea una mujer la que traiga a nuestro país la que quizá sea la carrera más importante del mundo en triatlón. Inspirador, aunque no sorprendente.

Hace tiempo que las mujeres estamos atravesando un proceso de alquimia y cambiando el material del que estamos hechas. Poco a poco, nos estamos convirtiendo justamente en eso: mujeres de hierro, invencibles e inagotables. De hecho, Marialuz me cuenta que quien estuvo detrás de la creación del Ironman desde el comienzo, fue una mujer, lo que nos hace pensar que la carrera talvez algún día debería llamarse Ironwoman. Pero un paso a la vez...

Valerie Silk es la persona que creó el primer Ironman de la historia en 1978, cuando, después de un divorcio, su esposo y ella se repartieron un exitoso gimnasio y una incipiente carrera (el Ironman) respectivamente. Con el tiempo, Valerie llegaría a vender la licencia de la carrera por tres millones de dólares y se retiró a California. Hoy, no sabe nada del Ironman ni tiene contacto con sus organizadores; sin embargo, es responsable por la gloria de miles y miles de deportistas. Es la mujer que apostó por la pasión del deporte, por cómo este cambia a la gente. “Eso me inspiró muchísimo”, dice Marialuz.

Para Marialuz, sin embargo, el deporte no se trata de feminismo; nunca lo ha pensado así. “Realmente no sé si ser deportista y ser fuerte es un símbolo feminista. Solo sé que siempre sentí que podía hacer lo que yo quería. Se necesita fortaleza para hacer lo que uno quiere. La mujer ha sido fuerte siempre; solo que hoy tenemos un montón de oportunidades”, dice Marialuz.

Marialuz no es solo una gran deportista y empresaria. Es, además, la feliz madre de cuatro hermosos hijos. Balancear la maternidad con su carrera es un reto; pero también un gran placer: “El tema es poder balancear las dos cosas. Me encanta llegar del trabajo o de entrenar y poder pasar con mi familia, para luego regresar al deporte. Me gusta poder tener esas dos alternativas para estar bien. Esa versatilidad de salir vestida de ciclista y luego irme a trabajar es necesaria. El factor sorpresa es una constante en mi vida”, concluye esta inteligente y perseverante mujer, madre, deportista y empresaria.”.

Fotos: Soledad Rosales/ Producción Johana Konanz y Estefanía Chacón/Texto Paulina Terán/ Maquillaje: Peluqueria FashionJB- Daniela Cabezas. Contacto: 2-895-446/ Peinado: Waleska Wilson. Contacto: 099-700-3532/Vestuario: Zara

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